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En el ring de la frontera el asilo ganó
WASHINGTON, DC | TIEMPO DCODER | JUL 2 2025 |
Bloqueos y desacuerdos, repeat.

Foto: EFE
Si pensaste que con la aprobación del Big, Beautiful Bill en el Senado ya todo estaba resuelto, pues… te equivocaste. El megaproyecto de ley se quedó atascado en la Cámara de Representantes. ¿La razón? Los legisladores y sus desacuerdos. Un juez le dice a la Casa Blanca que el asilo en la frontera no se cancela por decreto. Otro juez le dijo que el TPS para inmigrantes haitianos se debe mantener. Y en Wisconsin la Corte anula oficialmente la ley antiaborto del siglo XIX. Musk quiere acabar con el monstruo que él mismo ayudó a construir: busca fundar un nuevo partido político, el “American Party”. Otro día normal en la política estadounidense.
EL DÍA EN HEADLINES.
El Big, Beautiful Bill se atasca en la puerta de la Cámara.
Lo que debía ser una votación rápida en la Cámara de Representantes sobre el megaproyecto de ley terminó en una odisea de más de 90 minutos. ¿La razón? Algunos republicanos no estuvieron de acuerdo en todo. El deadline del 4 de julio se ve cada vez más como un wishful thinking, mientras los legisladores del GOP corren de reunión en reunión tratando de evitar que su propio partido eche para atrás el proyecto de ley. El camino para la aprobación del paquete legislativo se pone más engorroso.
El asilo en la frontera no se cancela por decreto, dictamina un tribunal.
Un juez bloqueó la política de la Casa Blanca que prohibía pedir asilo a los inmigrantes que cruzaban la frontera sur. El juez federal de distrito Randolph Moss determinó que el gobierno se extralimitó en su autoridad al eludir la ley de inmigración. “El presidente no puede adoptar un sistema de inmigración alternativo que sustituya las leyes promulgadas por el Congreso”, dijo Moss. El fallo frena una de las medidas más duras del presidente contra inmigrantes, mientras su equipo promete apelar.
Wisconsin le dice adiós a una ley del aborto de 1849.
La Corte Suprema de Wisconsin eliminó oficialmente la ley antiaborto del siglo XIX. El fallo, 4-3, favorece a quienes defienden el derecho a decidir y deja vigente una ley más reciente que permite abortos hasta la semana 20 de embarazo. La decisión es resultado directo del cambio ideológico en la corte tras elecciones clave. Porque sí, en Wisconsin se vota hasta el siglo en el que se puede abortar.
Las protecciones para inmigrantes haitianos sigue (por ahora).
Un juez detuvo el intento de la administración de terminar antes de tiempo las protecciones migratorias para miles de haitianos en Estados Unidos. El gobierno quería cerrar el TPS sin seguir las reglas ni los tiempos. Por ahora, la protección sigue vigente. Aunque en público se diga que no es un asylum program, en la práctica, el TPS sigue siendo un salvavidas legal para miles de personas.
Estados Unidos first, Ucrania puede esperar.
El Pentágono pausó un envío clave de armas a Ucrania para revisar si todavía queda suficiente artillería en casa. Misiles, municiones y otros regalitos de guerra quedaron en pausa hasta nuevo aviso. Oficialmente es para “proteger los intereses de Estados Unidos”, pero en Kiev ya lo sienten como una puerta que se está cerrando. Y todo esto mientras Rusia lanza uno de sus mayores ataques en territorio ucraniano. El mensaje es claro: si hay que elegir entre arsenal propio o ayudar, guess what.
Trump dice que hay trato de paz en Gaza (pero solo Trump lo dice).
El presidente anunció que Israel aceptó un ceasefire con Hamás. Solo que... Israel no ha confirmado nada (todavía). Hamás dice que está “evaluando” el documento de alto al fuego enviado por Egipto y Catar, mientras el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu continúa con los ataques en Gaza. Los comentarios de Trump llegan a solo unos días de la visita de Netanyahu a la Casa Blanca el próximo lunes.
EN PROFUNDIDAD.
La economía siente el control migratorio.

Foto: Shraga kopstein/Unplash
La narrativa de que menos inmigración fortalece a la economía suena bien hasta que empiezan a hacer falta trabajadores, consumidores y dinamismo en ciudades que se fortalecieron (económicamente) gracias a quienes llegaban de fuera. Las nuevas decisiones migratorias de la Casa Blanca ya no son solo titulares: se está filtrando a los números, y no en el mejor sentido. La caída en los flujos de inmigración amenaza con ralentizar el crecimiento económico y elevar la inflación, justo cuando el país intentaba mantener su impulso. ¿Menos inmigrantes? También menos actividad, menos gasto y, en algunos casos, menos comunidad. Para muchos, la “mano dura” está dejando vacíos difíciles de llenar. Lo que empezó como una promesa electoral está impactando silenciosamente a sectores clave. Y no hay decreto que reemplace el motor que representaba la inmigración.
No se tapa el sol con un dedo. Mientras se dice que la economía va a mejorar, los datos cuentan otra historia. “La economía se verá levemente disminuida en el largo plazo y la inflación subirá un poco”, ya advierte el economista Bernard Yaros en un informe de Oxford Economics.
La inmigración neta cae y la economía lo empieza a sentir. Según un análisis de Oxford Economics, la inmigración neta —es decir, el ingreso de personas menos las salidas— está en una tasa anualizada de 600.000 personas, lo que representa una caída de aproximadamente un tercio respecto a los últimos tres meses de 2024. Esta disminución se atribuye principalmente a la fuerte baja en la inmigración no autorizada, por el aumento de deportaciones y el freno en los cruces fronterizos. Esto ya está afectando la disponibilidad laboral en sectores clave.
Las ciudades que dependían de los inmigrantes ahora se enfrían. El impacto más fuerte se ve en lugares como St. Louis, Buffalo y Pittsburgh, según reporta el Wall Street Journal, donde el flujo migratorio había impulsado economías locales que venían a la baja. Ahora, con las redadas del ICE y el miedo, negocios pierden clientes, trabajadores dejan de asistir y la vida cotidiana se ralentiza. La caída no es solo estadística: ya se está notando en las calles, en los restaurantes y en la actividad comercial.
El impacto macro puede empeorar si se endurece la política.
El mismo informe de Oxford Economics estima que, si se mantiene esta tendencia, el PIB de Estados Unidos será un 0.25% más bajo a largo plazo. Aunque ese número puede parecer pequeño, las consecuencias acumulativas son significativas: menos crecimiento, más presión salarial e inflación sostenida. Y esto podría profundizarse si se implementa el nuevo proyecto de ley aprobado en el Senado, que incluye $175,000 millones en medidas adicionales de control migratorio.
¿Conclusión a corto plazo y largo plazo? La política migratoria dura no está salvando a la economía, todo lo contrario, la puede asfixiar y la Casa Blanca lo sabe: hace dos días el presidente Trump dijo que sí va en serio las exenciones para aquellos trabajadores inmigrantes en sectores como la agricultura y la hostelería.
LO QUE SE DICE Y LO QUE NO.
El síndrome del outsider millonario.
Elon Musk dice que podría lanzar su propio partido, el America Party. Promete que será la solución a la deuda nacional y al “porky pig” de los dos grandes partidos Lo anunció en X en medio de un berrinche (otro más) contra el Congreso y su insano megaproyecto fiscal. La idea suena disruptiva, moderna y hasta necesaria, pero también suena a déjà vu.
It is obvious with the insane spending of this bill, which increases the debt ceiling by a record FIVE TRILLION DOLLARS that we live in a one-party country – the PORKY PIG PARTY!!
Time for a new political party that actually cares about the people.
— Elon Musk (@elonmusk)
7:08 PM • Jun 30, 2025
Pero, ajá. Vayamos a la realidad. Musk no es un espectador. Fue el mayor donante de la campaña republicana el año pasado: más de $290 millones, según OpenSecrets. Ayudó a Trump a volver al poder y, ahora que las decisiones no le gustan, amenaza con romper todo. Tiene recursos infinitos, una plataforma que lo ayuda y una narrativa populista que le funciona. Pero, la realidad es que ni eso garantiza votos: 59% de los independientes tienen una imagen desfavorable de él, según Quinnipiac University. Difícil base para una “tercera vía”.
Estados Unidos no es precisamente terreno fértil para los terceros partidos. Las leyes estatales hacen todo menos facilitarlo (en Texas, su estado, necesitaría 81,000 firmas solo para empezar). Históricamente, estos movimientos o mueren rápido o son absorbidos. El caso más conocido es el de Ross Perot en 1992: sacó 19% del voto popular, no ganó ningún colegio electoral, pero puso el tema del déficit en el centro del debate. ¿Musk quiere competir o condicionar?
Quizás esa sea la obra detrás del telón. No busca el poder directo, sino hacerse indispensable. Monta la amenaza de un nuevo partido no tanto para ganarle al sistema, sino para apretarlo cuando no le gusta el rumbo. Y si eso suena familiar, es porque ya lo hizo una vez. Solo que esta vez, el magnate quiere ser la oposición… de la administración que él ayudó a construir. Ironías, ironías.
NO ME DIO TIEMPO DE EXPLICARTE.
Paramount paga al presidente. La compañía acordó pagar $16 millones para cerrar una demanda de Trump por una entrevista “mal editada” de Kamala Harris en 60 Minutes. La demanda pedía $20 mil millones. ¿El dinero? Para su futura biblioteca presidencial.
Vietnam sí, pero con condiciones. El presidente anunció un acuerdo comercial con Vietnam: 20% de arancel para lo que venga de allá, y 40% si es “reexportado” desde China. A cambio, Vietnam abriría su mercado a productos estadounidenses como SUVs. Todo según Trump, claro.
¿Privacidad médica? No aplica si migras. Veinte estados demandan a la administración por compartir datos de salud de inmigrantes con agentes de inmigración. California alega que violaron leyes federales de privacidad. Incluía nombres, estatus migratorio y hasta direcciones.
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Redactor: Paola Sardiña | Editor: Marcos Porras | Editor jefe: Marcos Marín