Lo prometido (con Epstein) no fue deuda

WASHINGTON, DC

TIEMPO DCODER

JUL 9 2025

CRIPTOIMPERIO TRUMP.

Foto: Kanchanara / Unsplash

Una burbuja política llamada criptomonedas. La administración Trump ha quedado más expuesta al universo cripto que nunca. Poder. Control. Y una nueva era para construir un imperio: el presidente reportó ingresos millonarios ligados a la moneda digital el año pasado. Los Epstein files que nunca llegaron: la promesa de Pam Bondi se esfumó con el nuevo informe del Departamento de Justicia sobre el caso. Washington pierde la paciencia con Moscú: nuevas sanciones a Rusia están sobre la mesa.

EL DÍA EN HEADLINES.

ALLIGATOR ALCATRAZ: SUDOR, MOSQUITOS Y CERO DERECHOS.

Los familiares de los inmigrantes detenidos en la cárcel ubicada en los Everglades denunciaron condiciones inhumanas: sin agua, sin electricidad, sin duchas y  con muchos, muchos mosquitos. Algunos llevan días sin acceso a medicamentos o abogados. Desde el estado dicen que todo está en orden, mientras los detenidos reportan comida con gusanos y baños inutilizables. Miami-Dade exige acceso al lugar, que irónicamente fue construido en su propio terreno.

LA CORTE SUPREMA FRENA POLÉMICA LEY MIGRATORIA EN FLORIDA.

El máximo tribunal pausó una de las leyes más duras contra inmigrantes en Florida, impulsada por el gobernador Ron DeSantis. La medida criminalizaba entradas de inmigrantes indocumentados al estado, limitaba derechos de víctimas y obligaba a compartir datos con ICE. Pero por ahora no va: la ley está suspendida mientras se resuelve su constitucionalidad. El mensaje de la Corte: los estados no hacen política migratoria, aunque algunos insistan en jugar a ser Border Patrol.

DOJ INVESTIGA A COMEY Y BRENNAN (OTRA VEZ).

El Departamento de Justicia abrió investigaciones contra los exjefes del FBI y la CIA, James Comey y John Brennan. ¿Los cargos? No se sabe. ¿Las pruebas? Tampoco. Brennan ya respondió: esto es pura “politización del sistema de inteligencia”. Todo mientras el mismo DOJ enfrenta criticas por el caso Epstein.

OTRA VEZ CONTRA HARVARD: LA ADMINISTRACIÓN LANZA NUEVAS AMENAZAS.

El gobierno volvió a cargar contra Harvard, amenazando con quitarle la acreditación y exigiendo datos sobre estudiantes internacionales. Dicen que la universidad violó leyes antidiscriminación tras el 7 de octubre. Harvard niega todo y defiende su campus, pero la presión sigue: si no corrige el rumbo, podría perder reconocimiento académico. 

MÉDICO DE BIDEN INVOCA LA QUINTA (Y NO ES LA SINFONÍA).

El doctor personal de Biden se negó a declarar ante el Congreso, citando la Quinta Enmienda. Los republicanos quieren saber si mintió sobre la salud del expresidente durante su campaña. El doctor dice que simplemente está ejerciendo sus derechos, y no, no está admitiendo culpa. Y mientras tanto, más asesores de Biden son llamados a declarar. La salud se volvió política, otra vez.

SANCIONES CONTRA RUSIA ESTÁN SOBRE LA MESA.

El orador de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, dijo que está abierto a votar una ley de sanciones contra Rusia, en línea con un proyecto que ya avanza en el Senado con bastante apoyo. La iniciativa busca castigar a Vladimir Putin (otra vez) por no querer hablar de paz en Ucrania. Trump, por su parte, dijo que está mirando la ley “muy seriamente” tras expresar su “decepción” con el líder ruso. ¿Fin de la luna de miel? Tal vez. Pero por ahora, el Congreso afila el lápiz con waiver presidencial incluido.

EN PROFUNDIDAD.

LA BURBUJA POLÍTICA CRIPTO.

Foto: Unplash

El Senado votó a favor de regular las stablecoins. La Casa Blanca dice que no hay conflicto. Y Trump gana millones con criptomonedas. Todo esto puede ser legal. Pero no por eso deja de ser sospechoso. En teoría, abrirse al mundo cripto es un paso hacia adelante: un intento por regular un sector desordenado y lleno de estafas. Pero cuando esa apertura viene liderada por alguien que gana dinero con el resultado —y ese alguien es el presidente de Estados Unidos—, el discurso de innovación se vuelve difícil de tragar.

Un dinerito extra no cae mal. En 2024, Trump reportó ingresos por más de $57 millones gracias a una empresa cripto en la que figura como “inspirador”, además de otros millones en bitcoin, NFTs, y merchandising digital. Todo está, según la Casa Blanca, en fideicomisos gestionados por sus hijos. Pero eso no ha frenado las alarmas: demócratas como Elizabeth Warren acusan que esta jugada convierte la política cripto en un negocio familiar institucionalizado.

La burbuja política de las criptomonedas. El Senado aprobó el GENIUS Act, una ley que regula las stablecoins, esas cripto que imitan el valor del dólar. La apoyaron demócratas y republicanos. Pero justo ahora, cuando Trump y su clan lanzan sus propias monedas digitales (incluyendo un meme-coin con su cara), el timing no podría ser más conveniente. La tensión es clara: por un lado, una ley pensada para dar transparencia al sector. Por otro, un presidente cuya fortuna crece en paralelo a esa legislación.

Todo esto ocurre mientras el Congreso intenta encontrar una narrativa coherente frente a las criptomonedas: ¿son una amenaza al dólar o una oportunidad para modernizar el sistema financiero? ¿Y qué pasa cuando el poder ejecutivo es también beneficiario privado del nuevo sistema?

Lo que está pasando va más allá. 

  • Trump está profundamente metido en el ecosistema cripto, con ingresos millonarios provenientes de NFTs, bitcoin y una firma privada ligada al sector.

  • El Congreso aprobó el GENIUS Act, un proyecto de ley para regular las stablecoins que, según críticos, podría terminar legitimando indirectamente los negocios cripto de Trump.

  • El sector cripto gastó más de 119 millones en lobby político en las últimas elecciones. No es un detalle menor: esta es una de las industrias que más rápido ha ganado poder de negociación en Washington.

  • Demócratas como Elizabeth Warren piden frenar la ley hasta que se investigue el conflicto de intereses, pero otros dentro del mismo partido prefieren avanzar con la regulación y mirar hacia otro lado.

  • La derecha apoya el proyecto, pero deja claro que no aceptará regulaciones que afecten a Trump o a sus aliados. La jugada es clara: abrir el mercado, sin tocar el bolsillo del líder.

  • El modelo cripto-político made in USA ya se exporta: el caso LIBRA en Argentina, promovido por el entorno de Javier Milei, alcanzó una valuación de 4,000 millones antes de desplomarse en un rug pull. Miles de inversores perdieron su dinero mientras insiders retiraban millones, en una estafa con respaldo institucional.

El problema no es solo ético. Es estructural. ¿Qué tan fuerte puede ser una regulación si el presidente mismo es una de las partes interesadas? La duda no es solo sobre el futuro de las criptomonedas, sino sobre la capacidad institucional de Estados Unidos para separar poder político de poder económico. Y en esa línea, todo lo que huela a blockchain empieza a oler también a burbuja.

LO QUE SE DICE Y LO QUE NO.

UN SILENCIO QUE HACE RUIDO.

¿Qué se dice esta semana? Que Jeffrey Epstein se suicidó y que no hay una lista secreta de clientes. ¿Qué no se dice (pero se siente)? Que muchos no están dispuestos a creerlo. El nuevo informe del Departamento de Justicia, presentado bajo la actual administración, no encontró pruebas de asesinato, ni de una conspiración estatal, ni del famoso listado de poderosos implicados. Y sin embargo, nadie parece satisfecho.

Pam Bondi, la Attorney General, prometió más de lo que entregó. En febrero, insinuó que tenía la supuesta lista en su escritorio. Hoy sabemos que no era tal. La frustración dentro del círculo de Trump es real: no tanto porque el caso esté cerrado, sino porque la forma de cerrarlo dejó una resaca política difícil de digerir. Y más de uno en la base MAGA siente que le cambiaron el guion a mitad de la noche a la mañana. 

La idea de que Epstein fue asesinado o de que alguien importante está siendo protegido está presente (y no solo en teorías conspirativas en redes). Esto no es gracias a pruebas, sino al vacío. Porque cuando un caso involucra a multimillonarios, expresidentes y un historial de abusos impunes, la falta de revelaciones se vuelve sospechosa por sí sola. ¿El problema? Que a veces la verdad es mucho menos cinematográfica de lo que nos gustaría.

Pero el daño está hecho. El “no hay más que mostrar” suena a “algo están escondiendo”. ¿Se manejó mal la comunicación? Probablemente. ¿Hay algo más detrás? Nadie lo prueba. ¿Debería importarnos menos? Tal vez no. Porque más allá del morbo y las conspiraciones, sigue habiendo víctimas reales y un sistema judicial que parece no saber cómo recuperar credibilidad cuando la expectativa es Hollywood y la entrega es un memo… 

NO ME DIO TIEMPO DE EXPLICARTE.

  • La lista negra académica. Documentos judiciales revelaron que el gobierno de Trump usó un sitio web anónimo y pro-Israel para identificar y deportar académicos pro-palestinos. El “equipo tigre” del Homeland Security armó expedientes con base en esa información. 

  • El plan SAVE ya no te salva del interés. A partir del 1 de agosto, los préstamos estudiantiles bajo el plan SAVE empezarán a generar intereses otra vez. La medida llega tras un fallo judicial que declaró ilegal el plan de Biden. Los pagos siguen en pausa, pero la deuda crecerá igual.

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Redactor: Paola Sardiña | Editor: Marcos Porras | Editor jefe: Marcos Marín